¿Qué beneficios tiene cocinar a fuego lento?

Cocinar a fuego lento es considerada una de las maneras más eficientes de preparar los alimentos, especialmente para carnes y vegetales. Durante la cocción lenta los alimentos se guisan despacio y no es necesario que el agua alcance su punto de ebullición, por lo que los sabores, aromas y texturas de las comidas mejorarán de forma considerable.

El fuego lento es una técnica culinaria reconocida por sus numerosas ventajas, relacionadas con el incremento en la calidad de los sabores y el hecho de cambiar muy poco la estructura de los alimentos, permitiendo que estos logren conservar todos sus nutrientes. Todo lo anterior, ofrece beneficios interesantes para la salud de las personas, incrementando la aceptación del método.

Desde Kitchen Academy te daremos algunas consideraciones necesarias para cocinar a fuego lento, listaremos las principales ventajas que se obtienen de incorporar la cocción lenta a nuestra rutina habitual de preparación de los alimentos y cerraremos con algunas recomendaciones básicas para aprovechar al máximo esta técnica culinaria.

Consideraciones generales sobre cocinar a fuego lento

La cocción a fuego lento implica cocinar los alimentos en un líquido que se mantiene a temperaturas por debajo del punto de ebullición, usualmente a unos 85 y 96°C. De esta forma, los ingredientes del plato se guisan a una temperatura estable, que nunc termina de romper en hervor y permanece así por un largo periodo de tiempo.

Para la aplicación de esta técnica es necesario estudiar bien cada uno de los pasos involucrados en la receta ya que se vuelve necesario realizar algunos ajustes sobre algunos detalles para alcanzar el resultado deseado. Esto nos ayudará a entender cuando resulta conveniente la técnica y en qué ocasiones deberíamos dar preferencia a las técnicas de cocción rápida.

Del mismo modo, el análisis previo nos ayudará a seleccionar las herramientas de cocina apropiadas a la ocasión. Por ejemplo, para lograr una cocción lenta no es recomendable trabajar con ollas de presión, ya que lo adecuado serían las ‘Slow Cooker’, ollas de cocción lenta donde solo tendrás que llenar con agua, colocar el alimento y esperar el tiempo programado.

En cuanto a los líquidos a utilizar para la cocción lenta, puede que lo más popular sea el uso de agua. No obstante, dependiendo de la receta, la combinación de ingredientes y la textura que se desee alcanzar, se puede trabajar incorporando vino, cerveza, jugos y caldos. Esta decisión ya quedará a criterio o gusto personal del cocinero.

Ventajas y beneficios de cocinar a fuego lento

La técnica funciona bastante bien con las carnes duras. Al cocinarlas a baja temperatura, con una cantidad mínima de líquidos y por un espacio de tiempo prolongado, las carnes duras consiguen ablandarse, mantener su sabor original y que penetren en su interior los sabores del resto de ingredientes utilizados en la receta.

Por supuesto, la lista de beneficios de cocinar a fuego lento resulta mucho más amplia, por lo que nos hemos dado a la tarea de ofrecerte una explicación más detallada de cada uno de ellos:

• Intensidad en los sabores

Gracias a la cocción lenta y bajas temperaturas se potencia el sabor de los alimentos. El líquido se va evaporando a medida que va cocinando los ingredientes, lo que permite que se cree un sabor concentrado en el líquido resultante. Por supuesto, es necesario gestionar esto con cuidado, especialmente en lo que respecta a la sazón y los condimentos utilizados antes de la reducción.

• Mejor textura en las carnes

En el caso de las carnes duras, cuando estas se cocinan a bajas temperaturas no solo se ablandan, sino que adquieren una mejor textura. Además, se aprovechan sus jugos internos y las especias utilizadas en la receta consiguen penetrar con mayor facilidad, fijándose tanto en el interior de la carne como sobre su superficie.

• Alimentos más apetecibles

La apariencia de los alimentos también se ve beneficiada por la cocción lenta. Tanto las carnes como los vegetales y las verduras adquieren un aspecto mucho más apetecible, jugoso y brillante en comparación con la textura que resulta de hervir. Verduras, carnes, pescados, legumbre y huevos son algunos alimentos que lucen mejor gracias a la cocción a fuego lento.

• Completa eliminación de las bacterias

La combinación de calor y cocción por largos periodos de tiempo consiguen deshacerse de todas las bacterias que puedan existir en los alimentos. Esto resulta beneficioso para la salud de los seres humanos al reducir los riesgos relacionados con el consumo de alimentos cocidos indebidamente y las enfermedades asociadas a microbios como la Salmonella y el Norovirus.

• Conserva todos los nutrientes

A nivel nutricional, cocinar a fuego lento los alimentos garantiza la conservación de sus nutrientes, evitando que estos se desperdicien en el agua o cambie su bio-disponibilidad al ser sometidos a temperaturas superiores al punto de ebullición. Otro punto importante sería el hecho de que facilita la digestión de alimentos como las carnes duras.

• Difícil equivocarse con el tiempo de cocción de los alimentos

Si eres de las personas a quienes les cuesta concentrarse en la cocina y sueles quemar o pasar de cocción los alimentos, entonces te conviene aprender recetas que involucren cocción lenta. Esto te garantizará la tranquilidad de que no equivocarte con los tiempos de cocción, ya que siempre tendrás suficiente margen de tiempo para realizar cualquier corrección.

Recomendaciones básicas para aprovechar la cocción lenta

Los primero, será adquirir los utensilios adecuados. Es posible cocer lentamente los alimentos en cualquier olla, pero la realidad es que si no quieres mantener tu atención en un cronómetro, puedes aprovechar herramientas como las ollas ‘Slow Cooker’, que cuentan con un mecanismo de cuenta atrás y consiguen mantener temperaturas exactas durante todo el proceso.

Finalmente, te convendría mucho investigar y experimentar con diferentes recetas que involucren cocción lenta. De esta forma podrás familiarizarte con la técnica y tomar confianza para implementarla cada vez más en tu vida cotidiana. Al dominar la técnica, puedes tener la seguridad de que tus comensales quedarán cautivados con cada una de tus preparaciones.