Lavarse las manos, su importancia

Hoy hablamos de la importancia de lavarse las manos. Nosotros que pasamos tantas horas entre fogones, sabemos la importancia de ese, en apariencia, simple gesto. Lavarse las manos pueden significar en tiempo unos quinces segundos de nuestras vidas. Mañana día 15 de Octubre se celebra el día Mundial del Lavado de Manos. Nosotros hoy vamos a hablaros de la importancia de un gesto que puede salvar vidas. Este año el lema del día Mundial es «Hacer un hábito de lavarse las manos».  Va encaminada a conseguir que los niños conviertan en algo normal, el lavado de manos. Que ni siquiera se planteen no hacerlo en las ocasiones necesarias.

Lavarse las manos, apenas quince segundos

Muchas infecciones se transmiten por contacto, así que podemos asegurar que lavarse las manos es un método eficaz de prevención. Ni que decir tiene que lavarse las manos, al manipular alimentos tiene una importancia mayúscula. En Kitchen Academy, concienciamos a nuestros pequeños y mayores en la necesidad de esa practica. Por ejemplo una de las enfermedades a la que se puede poner freno es la Hepatitis A. Su transmisión suele hacerse por alimentos contaminados o las heces de una persona enferma.

Es tan importante este gesto, que existen programas completos de organizaciones como la OMS o UNICEF, dedicados a concienciar en el lavado de manos. Incluso dirigidos a sectores como la medicina. Una persona adulta puede «transportar» casi un millón de bacterias. Tanto en su piel, como dentro de su organismo. En principio esas bacterias son necesarias, y en una persona sana no dan mayores problemas. Pero ¿y si estamos enfermos o incubando una infección? Ahí es donde vienen los problemas. Las manos van a todos lados, tocando, y agarrando objetos y cuerpos. Las manos van a la cara, vemos a un niño pequeño, lo acariciamos, de la misma forma que haremos lo propio con un perro. La cadena de seres y objetos manoseados, es infinita. En cada uno de esos gestos, compartimos nuestras bacterias y gérmenes. Así como tomamos prestados los del resto. Gérmenes y bacterias que pueden estar en nuestras manos hasta tres horas.

Acciones cotidianas…

Manejar billetes o monedas. Ir al baño. Estornudar y taparse la boca con la mano. Tocar a nuestras mascotas. Manipular alimentos crudos… Todas ellas son acciones en las que el uso de las manos debería implicar un lavado de las mismas. Que decir tiene el peligro de morderse las uñas, si no se han lavado las manos. Hay que lavarse las manos, y hacerlo correctamente. Porque mal hecho no sirve de nada. Vamos a ver cómo hay que lavarse las manos, repetimos quince segundos que son vitales.

¿Cómo hay que lavarse las manos?

Lo más cómodo es lavarse con agua tibia, pero la desinfección es más completa con agua caliente. Así que si hemos realizado alguna acción «de riesgo», ni dudarlo un segundo, agua caliente. Siempre que las manos estén sucias, hay que usar jabón. El jabón puede presentarse en pastilla o liquido, en nuestro hogar el primero se puede usar, desde luego en lugares públicos mejor liquido. Para una desinfección completa usar un preparado hidroalcóholico. Lavarse las manos debería tomar un tiempo de quince segundos. El secado de las manos es importante, con toalla de algodón en baños privados. Secador o papel en baños públicos. Lavarse las manos y terminar de secarse con el pantalón, es un error. Debemos frotar las palmas de las manos, entrelazar los dedos y llevar el lavado a las muñecas.

Este gesto debemos repetirlo tantas veces como sea necesario. Si tenemos dudas acerca de la conveniencia de lavarnos las manos en una situación, hacerlo sin más. Hay personas a las que se les irritan después del lavado de manos. Habrá que hidratar la piel con el uso de alguna crema indicada.

La gran pregunta, ¿cuándo me lavo las manos?

Ya lo hemos indicado, siempre que realicemos alguna tarea de riesgo. Algunos pensarán pero eso es ¡¡todo el rato!! Y casi tienen razón. Si en nuestro día a día pensamos en la limpieza de las manos, en la importancia de mantenerlas limpias, las ocasiones de riesgo disminuyen. Un listado de las ocasiones en las que lavarse las manos es imperativo sería el siguiente:

• Obviamente cuando tengamos las manos sucias,
• Cuando preparemos alimentos. Antes de hacerlo y después de terminar. En ocasiones por los distintos alimentos usados, será necesario limpiezas intermedias.
• Al compartir tiempo con nuestra mascota. La hora del paseo, del cepillado, al darle de comer, al jugar con él… Ojo, no tiene nada que ver con su estado de salud. Al igual que el ser humano, transportan gérmenes y bacterias.
• Tras tocar dinero, tras cambiar los pañales al pequeño de la casa o manipular la basura.
• Sin ninguna excusa antes de comer. Tocaremos los cubiertos con las manos, el pan, algunos alimentos…
• Después de haber usado el baño. Un consejo si usamos un baño publico, al salir no tocar con las manos la puerta.
• Si estornudamos o tosemos, que es una vía de salida de multitud de gérmenes.
• Después de estudiar, tocar los libros, el material escolar, y más si lo compartimos con otros.